Hace mucho tiempo que quería hacer esta receta. Ahora ya no está entre mis pendientes. Se puso de moda hace unos años. Es mágica porque consta de 2 masas diferentes que al hornear invierten su orden. ¿Recordáis la Tarta mágica? Algo parecido invierte las capas por la diferencia de densidad entre las masas.
¿Os ha pasado alguna vez que seguís fervientemente a una autora y bloguera y de repente desaparece de la faz de la tierra? Parece que la blogosfera siempre va a estar ahí y de repente sin avisar, se acaba. Hace años seguía a una bloguera americana que formó una familia en Noruega y escribía y fotografiaba tanto recetas americanas como escandinavas. De repente dejó de publicar. Y reconozco que a pesar de no conocerla en persona me quedé como extrañada, de esa ausencia, de esa falta de contenido, desangelado de noticias suyas. Sin saber si estaría bien, si le habría pasado algo, o si, simplemente, se habría cansado de publicar. Su blog The Transplanted Baker sigue ahí.
Lo mismo me pasó hace unas semanas con otra bloguera autora de varios libros que forman parte de mi biblioteca reposteril, Sandeea o Sandra Mangas del blog La Receta de la Felicidad. Con la diferencia que aunque hace un par de años que desapareció de las RRSS y dejó de publicar en su blog, hace sólo un poco tiempo que directamente desapareció el dominio y no hay forma de ver su contenido.
Quizá un día yo también me canse, me dediqué a otra cosa o simplemente ya no me llene ni me satisfaga el compartir las recetas, porque al blog hay que dedicarle cariño, mimo y TIEMPO y a veces hay que priorizar.
A veces uno se cansa o tiene algún problema que impide dedicar tiempo al blog. Quizá la vida personal, familiar o laboral no permite seguir dedicando tiempo a algo que antes nos llenaba y nos daba satisfacciones. Internet es efímero aunque a veces no nos dé esa sensación. A veces se ensalza algo que queda en el olvido después o alguien desaparece y te deja como «huérfana». En este caso siempre me quedarán sus libros, menos mal.
Bueno, dejemos de divagar y vayamos con la receta. El flan de huevo es uno de mis postres favoritos de toda la vida. Sandeea en su libro Chocolate tiene una receta, Chocoflan. Yo no lo he cubierto de chocolate y la receta del flan de huevo es el de toda la vida que hago siempre en casa pero el bizcocho de chocolate es el que aparece en su receta. Cuando hojeando su libro lo vi, recordé que nunca lo había hecho así que ya era hora de tachar otra de esas recetas pendientes.
Ingredientes a temperatura ambiente a no ser que especifique lo contrario. Podéis hacer el caramelo casero con 50 g de azúcar llevándolo al fuego con unas gotas de limón, yo prefiero no complicarme y utilizar el de Royal de toda la vida. He hecho el postre en el molde Fleury de Lys de Nordic Ware. Primero lo he rociado con aceite desmoldante y luego he puesto el caramelo líquido.
Con el molde de Nordic Ware queda de lo más bonito.
Bizcoflán
INGREDIENTES (8 buenas raciones):
Bizcocho
– 100 g de chocolate negro (55% de cacao)
– 150 g de mantequilla
– 100 g de harina
– 25 g de cacao puro en polvo
– 1 cucharadita o TSP de café soluble
– 1 cucharadita o TSP de levadura química
– 1/2 cucharadita o TSP de sal
– 3 huevos
– 150 g de azúcar
Flan de huevo
– Caramelo líquido para el molde
– 1/2 l de leche entera
– 4 huevos M
– 200 g de azúcar
– Corteza de 1 limón
– 1 rama de canela
Precalentamos el horno a 160º C. Preparamos el molde elegido con aceite desmoldante y caramelo al gusto. Preparamos la masa de bizcocho de chocolate. En un cazo calentamos la mantequilla al fuego y añadimos el chocolate troceado a fuego muy suave sin dejar de remover hasta que esté casi fundido. Retiramos del fuego acabamos de derretir el chocolate y reservamos. En un bol tamizamos juntos el cacao, la harina, la levadura, la sal y el café y reservamos. En otro bol batimos los huevos con el azúcar con un batidor hasta que la mezcla esté cremosa y después agregamos la crema de chocolate. A continuación añadimos los ingredientes secos y removemos con la ayuda de una espátula. Verter la masa en el molde y reservar. Preparar el flan calentando primero la leche junto a la corteza de limón y la canela, llevar a ebullición. En un bol batir los huevos con el azúcar, añadir la leche caliente colada, poco a poco y remover. Retirar las burbujas que se formen si no queréis que la superficie del flan quede muy agujereada, aunque a mí no me importa la verdad. Verter la masa con la ayuda de un cucharón o cazo, con cuidado. Cubrir con papel de aluminio el molde, colocar en un recipiente grande y rellenar con agua caliente para hacer el baño María. Hornear durante 1h. Sacar del horno, dejar enfriar a temperatura ambiente en el mismo molde y refrigerar (yo lo dejé toda la noche). Desmoldar y servir. Si no consumimos todo el mismo día guardar el sobrante en la nevera cubierto para evitar que se seque.
Está tan delicioso como parece.
Al corte queda de lo más bonito.
Me parece un postre con un toque retro encantador.
Delicioso, una combinación de texturas increíbles.
SI TENÉIS ALGUNA DUDA, SI OS HA GUSTADO LA RECETA, DADLE AL ME GUSTA, COMPARTID O DEJAD UN COMENTARIO. GRACIAS POR LEER MI BLOG Y HASTA LA PRÓXIMA ENTRADA. PATRI.